En los negocios no existe el corazón. Y si existe, el negocio está destinado al fracaso (a menos que sea un restaurante de anticuchos). Las empresas tienen como objetivo maximizar su beneficios (o minimizar sus costos según sea el costo). Es la premisa principal que mueve su comportamiento. La empresa tomará sus decisiones sólo usando como referencia un incremento del bienestar de sus dueños, expresado en términos de los beneficios. Esto nos revela la muchas veces cruda teoría económica. Y es cierta. Todas las personas tenemos esa característica para todo, especialmente los peruanos. El famoso “y cómo es” entra a la escena de cualquier actividad nacional. Todos queremos nuestra tajada. Y las empresas la quieren más grande.
Muchas veces se sataniza la ambición individual de las personas al mando de las empresas, acusándolas de inhumanas y maquiavélicas, en el sentido más riguroso de la obra “El príncipe”, y dando un papel más benévolo a las familias, que a la enfrentan la furia capitalista. Señores, la novela llamada economía no tiene malos ni buenos porque sus protagonistas tienen la capacidad de la doble personificación: pueden ser el “malo” y el “bueno” a la vez. Las familias son las dueñas de las empresas. El problema apareció cuando las empresas ya no tienen un solo dueño, sino miles o millones.
Entonces es que un monstruo llamado transnacional apareció, compró
La empresa no venía bien, las acciones en bolsa de la corporación Lindley no están ofreciendo buenas cifras y era necesario un ajuste. La planta de Surquillo, que preparaba la mágica esencia de la bebida de sabor nacional ahora será hecha por allá y aquí solo se la embotellará. Como dije, la decisión no es reprochable pues debió ser motivada buscando la eficiencia, mediante el ajuste en los costos de producción, y no en ambiciones del país del sur, pues la dueña es la gringa Coca Cola y en Chile, se quiera o no, muchas transnacionales ya están ubicadas y es el centro regional por excelencia (Unilever, Nestle, y para saber cuáles más simplemente revisen el reverso de la mayoría de los productos de su refrigerador).
Probablemente muchos apoyarán la tesis de que sus niveles de ventas disminuirán apoyados por un nacionalismo (muchas veces justificado) pero a mi parecer no creo que sea así. Wong sigue vendiendo lo mismo y la gente ya olvidó el tema, podrá renegar por un precio alto acusándolos de chilenos hi… pero igual cancelan con su tarjeta metro (del Banco del Trabajo, que era del grupo chileno Altas Cumbres). Chileno o no, una Inca Kola siempre acompañará bien un ceviche. Pero si me tocan ese plato, ahí sí agarro el fusil.
Etiquetas: chile, economias de escala, empresa, inca kola, nacionalismo, peru
4 comments:
Felicidades!
Su blog se encuentra entre los tres más votados de su categoría en el concurso 20blogsperuanos que se llevará a cabo este viernes a las 6:30 pm en el Centro de Convenciones del Hotel María Angola.
Agradeceríamos que nos confirme su asistencia o si enviará a algún representante para recoger su premio, en caso su blog gane, llamándonos a las oficinas de Inventarte.net al número 719-8845. Preguntar por Morena o Karla.
Yo pienso q el Presidente Alan Garcia tiene q hablar acerca de la Inka Kola, con Kimverly Clark, para q no fabrica la bebida de sabor Nacional en el pais del sur, porque chile odia al peru, lei muchos comentarios donde los chilenos insultan a los peruanos y no puede ser posible q ellos lleguen a tomar nuestra bebiba y despues decir los chilenos q la Inka kola es de ellos porque la esta fabricando en chile ahora, no por favor !!!!
Que el presidente impida esto !!!
El dueño del blog si puede llegar hablar con el presidente acerca de esto, se lo agradeceria..
besos
el nacionalismo pertenece al pasado, en este siglo XXI, ya fue; hoy en la epoca del intercambio economico, socila y cultural entre los paises, el destino del Perú es unirse politicamnte con us vecinos que le rodean, claro eso se hara dentro de muchos años, cuando estemos plenamente conscientes de que Perú no es mas que una provincia de America Latina.
Interesante blog, pero la teoría económica te tiene un poco reprimido, creo. Es una crítica constructiva, o al menos espero que la tomes así. La teoría económica es sólo una aproximación, no debes ser tan ortodoxo, la realidad es mucho más compleja, así que una aproximación empírica, un análisis de la realidad, no vendría mal. Decir que "la empresa tomará sus decisiones sólo usando como referencia un incremento del bienestar de sus dueños, expresado en términos de los beneficios. Esto nos revela la muchas veces cruda teoría económica. Y es cierta. Todas las personas tenemos esa característica para todo, especialmente los peruanos" es suponer que la gente no tiene en cuenta otras consideraciones más allá de las monetarias. Incluso si la ortodoxia de la teoría te es imprescindible te aconsejo revisar los resultados del juego del ultimátum. Es sólo una opinión.